Los minutos iban pasando con un R. Madrid en apariencia sosegado, mas solo en apariencia por el hecho de que el equipo vasco no le perdió en absoluto la cara a un partido en el que los dos equipos rondaron el tanto.Es una tradición en los torneos internacionales de fútbol que los aficionados vean a su deportista en actividad y sientan la emoció